MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
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En la operación han participado más de 200 militares para sacar de Sudán a una treintena de españoles y otras 72 personas de otras nacionalidades, sobre todo europeos y latinoamericanos.
Para llevar a cabo la misión, las Fuerzas Armadas españolas posicionaron en un primer momento en el aeropuerto militar de Wadi Seidna, al norte de Jartum, un avión A400 con dos vehículos VAMTAC y el personal de la fuerza terrestre para apoyar la evacuación. Unas horas después, aterrizaron otros dos A400 para completar el despliegue de toda la fuerza terrestre.
Establecido el perímetro de seguridad, se iniciaba el movimiento del convoy con personal civil desde la Embajada hasta el aeropuerto, donde una patrulla del elemento terrestre salía a su encuentro hasta zona segura, según ha informado el Estado Mayor de la Defensa (EMAD).
Una vez allí, el A400 ha transportado a los más de cien civiles hasta Yibuti, desde donde un total de 70 personas ha volado a España en un Airbus A330 y el resto ha permanecido en Yibuti para volver a sus respectivos países por otras vías.
En las próximas horas se espera también el regreso del grueso de los militares españoles del Ejército de Tierra y del Ejército del Aire y del Espacio responsables de la operación y que todavía se encuentran en Yibuti.
La Operación de Rescate de Personal No Combatiente (NEO por sus siglas en inglés) se inició el viernes con el posicionamiento en el aeropuerto de Yibuti de los aviones del Ejército del Aire.
En concreto, han estado implicados cerca de 90 militares de la I Bandera Paracaidista y del Mando de Operaciones Especiales del Ejército de Tierra, 80 miembros del Ala 31, el Grupo 45, el Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo y la Unidad Médica de Aeroevacuación del Ejército del Aire y del Espacio, un equipo de reconocimiento y enlace operacional del Mando de Operaciones y personal del Mando Conjunto de Operaciones Especiales y del JFAC (Componente Aéreo de la Fuerza Conjunta), entre otros.
Según explica el EMAD, antes de iniciar la evacuación desde Sudán, se llevaron a cabo las coordinaciones diplomáticas necesarias "y se establecieron las medidas de protección idóneas para esperar el momento de actuación más adecuado por lo delicado de la situación".
También ha apoyado la operación el personal del Destacamento Orión --actualmente desplegado en el Operación Atalanta--, que se ha convertido en base avanzada para el despliegue de la misión.
