AUGUSTA, Georgia, EE.UU. (AP) — El argumento de que los golfistas que se unieron a la serie LIV Golf no estarían en forma ni se habrían preparado adecuadamente para los majors quedó descartado al menos en el caso de Brooks Koepka. Nunca ha importado cuánto juegue o qué tan bien esté jugando, los majors siempre parecen sacar lo mejor del estadounidense.
Tras dos rondas en el Masters, ésa sigue siendo la realidad.
Confiado e incluso con un poco de arrogancia en su paso, Koepka recorrió sin bogeys el viernes el Augusta National para quedar con cinco bajo par y 67 golpes. Superó así al campeón amateur de Estados Unidos Sam Bennett y pudo refugiarse mientras la tormenta acechaba a sus rivales.
La tempestad obligó a parar por 21 minutos. Una hora después de que los golfistas regresaron al campo, el juego se volvió a detener, debido a las ráfagas que provocaron tres árboles caídos cerca de los espectadores en el hoyo 17.
El club confirmó que no hubo lesionados y rápidamente el rugido de los truenos fue reemplazado por el estruendo de las sierras eléctricas. Debido a la tormenta y los trabajos de recuperación, la segunda ronda se suspendió hasta el sábado.
Jon Rahm estaba tres tiros detrás después de nueve hoyos. Tiger Woods pelea para superar el corte con dos sobre par —el sábado iniciará en el hoyo 12 de par 3. Woods nunca ha fracasado en un intento de pasar el corte en el Masters.
Koepka jugó en la mañana y tras embocar cuatro putts de par cuatro a distancias de seis pies en seis hoyos, se encaminó a terminar 12 bajo par y 132 golpes después de dos rondas.
“Pude hacer todo lo que necesitaba”, enfatizó Koepka. “La confianza está ahí. Perdí la confianza debido a mi rodilla y eso fue todo”.
La gran sorpresa es su perseguidor —Bennett, un jugador de último año de Texas A&M, quien tuvo otra ronda de 68 y que tuvo el marcador más bajo de un golfista amateur después de 36 hoyos desde Ken Venturi en 1956.