MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Ahora, Lavrov y su homólogo turco, Mevlut Cavusoglu, se han reunido este viernes en Ankara para abordar un amplio abanico de asuntos bilaterales, incluida la guerra en Ucrania y el mencionado acuerdo de granos. Según informó Rusia, en la agenda también está el conflicto en Nagorno Karabaj o las relaciones de Turquía y Siria.
Respecto al pacto para la exportación de cereales, Lavrov ha reiterado la postura ya defendida hace semanas por las autoridades rusas, que pasa por denunciar que Naciones Unidas ha facilitado el envío de cereales ucranianos y no tanto el de fertilizantes rusos, cumpliéndose así tan solo la mitad del acuerdo.
"Hemos hablado sobre la implementación, o más bien la no implementación, de la iniciativa del mar Negro por parte del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres", ha manifestado Lavrov en rueda de prensa tras su encuentro con Cavusoglu, recoge la agencia rusa de noticias TASS.
De acuerdo con Lavrov, hay "estadísticas bastante serias" que confirman que la parte del acuerdo que beneficia a Ucrania sí se está cumpliendo, y ha aprovechado incluso para criticar la venta sin aranceles a países occidentales. Esto deja de lado a países más pobres, que reciben, según él, menos del tres por ciento de las exportaciones ucranianas.
En el otro lado de la balanza, la exportación de fertilizantes rusos no se está llevando a cabo según lo establecido en el pacto, pues los envíos de estos productos están encontrando "obstáculos en el camino", como la financiación, la logística e incluso las formas de transporte.
Tras varios desencuentros y bajo la amenaza de suspender el acuerdo, Rusia y Ucrania pactaron finalmente a mediados de marzo una segunda prórroga de este acuerdo --firmado el pasado mes de julio bajo la mediación de Turquía y Naciones Unidas-- y que estará vigente por cuatro meses más.
Sin embargo, Lavrov parece ahora amenazar con que este acuerdo no vuelva a renovarse a partir de julio, y ha incidido en que si los países occidentales no quieren cumplir con lo establecido en el acuerdo, "que continúen recibiendo los productos importantes desde Ucrania por tierra, por ferrocarril o por río".
De este modo, Rusia amenaza con suspender la exportación por aguas del mar Negro, y ha defendido que ya ha creado una "logística apropiada que funciona" y que, en caso de que se trunque el acuerdo con Ucrania, aplicará con Turquía y Qatar.
"Habiendo prorrogado este trato por un segundo período de 120 días y no encontrando ninguna señal de que alguien realmente pueda resolver estos problemas (...). Si no hay más avances en la eliminación de obstáculos a la exportación de fertilizantes y granos rusos, consideraremos si este acuerdo es necesario", ha zanjado.