YUBA, Sudán del Sur (AP) — Las condiciones de hambruna en el sureste de Sudán del Sur han dejado 13 personas muertas debido a la falta de alimentos y agua, aseguró el miércoles una ONG de ayuda.
PUBLICIDAD
Cientos de personas más de la comunidad minoritaria Jie del país están al borde de la inanición en la región noroccidental de Kapoeta en el estado Ecuatorial Oriental, aseguró la organización Humanitarian Development Consortium (Consorcio de Desarrollo Humanitario).
PUBLICIDAD
Miles de miembros del pueblo Jie han estado sobreviviendo con frutas silvestres como alimento sin un suministro de agua sostenible, pues todos los intentos de perforar pozos en las zonas donde viven han fracasado debido a los bajos niveles de agua, agregó la ONG.
Anteriormente, cuando necesitaba agua, la comunidad Jie emigraba a la zona de Boma, en el área administrativa de Pibor, en Sudán del Sur, pero eso derivó en violencia.
Años de guerra civil, hambruna, inundaciones y una economía en colapso han tenido un fuerte costo social en Sudán del Sur desde que el país más joven del mundo obtuvo su independencia en 2011.
Un “aumento reciente en el número” de personas hambrientas ha creado una “situación preocupante”, alertó el director ejecutivo de la organización, William Ngabonziza.
La situación es “horrible” con más de 5.000 personas acampadas actualmente a unos 75 kilómetros (46 millas) de la jefatura del condado, informó a The Associated Press el comisionado del condado de Kapoeta del Norte, Emmanuel Epony.
La comunidad ha sufrido durante los últimos tres años y sus líderes confirmaron que 10 ancianos y tres niños fallecieron recientemente después de pasar días sin comer, informó el jefe de los Chumai Boma, Peduin Anthony.
“No estoy segura de cómo vamos a sobrevivir ahora que las frutas silvestres caso se acaban”, dijo una anciana, Dapai Lolup, al grupo de ayuda. Agregó que la fruta silvestre es amarga y causa diarrea y dolor de estómago, especialmente en los niños.
El ganado, que es la principal fuente de sustento, también ha muerto en la región. A principios de 2017 se declaró formalmente una hambruna en partes de Sudán del Sur.
El año pasado, la ONU advirtió que hasta 1,7 millones de personas corren el riesgo de morir de hambre en Sudán del Sur.
Adicionalmente, casi 2 millones de personas han sido desplazadas por las inundaciones durante la temporada de lluvias en los últimos cuatro años.