LONDRES (AP) — Los niños de raza negra en Inglaterra y Gales tienen seis veces más probabilidades de ser sujetos de registros corporales por parte de la policía, según un informe a ser divulgado el lunes que halló que a los menores les fallaron las personas que juramentaron protegerlos.
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La comisionada para los niños, Rachel de Souza, halló que casi 3.000 menores fueron registrados a nivel personal entre 2018 y mediados de 2022, y que más de la mitad de los cacheos se efectuaron sin que un adulto adecuado estuviera presente.
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La investigación se inició después de que una chica negra de 15 años, de la que se sospechaba portaba marihuana, fue registrada en una escuela de Londres en 2020 por dos agentes policiales femeninas sin que otro adulto estuviera presente. La muchacha, identificada como “Niña Q”, estaba menstruando y no se le hallaron drogas. Un informe previo indicó que el racismo fue un factor probable para que se llevara a cabo el cacheo humillante.
“La valentía de la chica de hablar acerca de una cosa traumática que le ocurrió” derivó en el informe que halló “incumplimiento generalizado” de las salvaguardias y evidencia de una “práctica profundamente preocupante”, manifestó De Souza.
Los hallazgos siguen a un duro informe difundido la semana pasada que encontró que el público había perdido confianza en la Policía Metropolitana de Londres y que la fuerza estaba invadida de racismo institucional, misoginia y homofobia, y que no hacía lo suficiente para retirar a los agentes policiales de mal comportamiento. Ese informe fue encargado después de que un agente violó y mató a una mujer joven.
El nuevo informe señaló que niños que en ocasiones sólo tenían 8 años estaban siendo cacheados en sitios que frecuentemente eran inadecuados, tales como parques de diversiones o vehículos, y a veces incluso a la vista del público. En ciertos casos, al menos un agente presente era de un género distinto al del menor que estaba siendo registrado.
De Souza dijo que la disparidad era “totalmente inaceptable”.
El Runnymede Trust, un centro de investigación sobre igualdad de razas, dijo que los hallazgos eran “incluso más difíciles de asimilar” que el informe acerca de la Policía Metropolitana, que ha enfrentado informes críticos en el pasado. Dicho centro de análisis pidió retirar a la policía de las escuelas y revocarle su autoridad de cachear a niños.
“Con frecuencia los agentes policiales son incapaces de justificar la necesidad de efectuar registros corporales, ni pueden informar sobre el impacto en la salvaguardia del niño afectado”, declaró el grupo. “Todo lo contrario. También confirma que nuestra crisis policial no está confinada sólo a Londres; es nacional”.
De Souza dijo que los cacheos pueden ser necesarios, pero se requieren “salvaguardias robustas” para proteger a los niños.
