ATENAS (AP) — El servicio ferroviario se reanudó el miércoles en Grecia por primera vez desde un letal desastre ferroviario hace tres semanas, mientras el gobierno de centroderecha trataba de recuperarse antes de las elecciones generales.
PUBLICIDAD
El choque frontal del 28 de febrero, el siniestro ferroviario con más muertos en la historia de Grecia, dejó 57 fallecidos y docenas de heridos, de los que nueve seguían hospitalizados.
PUBLICIDAD
Los servicios nacionales y suburbanos de trenes se reanudaron en tramos limitados de la red con personal adicional en trenes y estaciones, así como puntos de reducción de velocidad obligatoria en zonas donde el riesgo de colisión se consideraba mayor.
El primer tren del día fue el servicio de las 04:45 de la mañana de Atenas a Inoi, 60 kilómetros (37 millas) al norte. También se restableció la conexión interurbana entre Atenas y su aeropuerto internacional.
Los servicios se reanudarán por completo el 11 de abril, incluida la ruta entre Atenas y la segunda ciudad más grande del país, Salónica.
La colisión mortal entre un tren de pasajeros en la ruta Atenas-Salónica y un tren de mercancías dejó sobre la mesa los problemas ya antiguos de los sistemas de seguridad en la red.
Quedan apenas unas semanas para las elecciones y el gobierno ha visto reducirse su ventaja en los sondeos de opinión aproximadamente a la mitad, a apenas tres puntos porcentuales, sobre su principal rival, una formación de izquierdas.
El primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, dijo el martes que celebraría los comicios en mayo, un mes más tarde de lo previsto en un principio, aunque no dio una fecha exacta. Las elecciones deben celebrarse antes de julio, cuando expira el mandato del gobierno.
“Fue una tragedia que nunca debería haber ocurrido. Es inconcebible pensar que en Grecia en 2023 podría haber dos trenes en la misma vía, viajando en direcciones opuestas, y que nadie se daría cuenta”, dijo Mitsotakis en una entrevista con la televisora privada Alpha.
“Creo que la gente, aunque sienta ira y enojo, comprende que este accidente fue el resultado de una serie de errores cometidos durante muchas décadas. Ahora tenemos una obligación de abordarlos de forma drástica (...) Sentimos una gran responsabilidad”.
En la principal estación ferroviaria de Atenas, Eli Tosca dijo que estaba deseando utilizar los trenes para llegar a su trabajo como limpiadora 20 kilómetros (unas 12 millas) al norte de la capital.
“No tengo miedo. Me siento lista. Me afectó mucho lo que ocurrió. Lloré mucho, pero tenemos que trabajar”, dijo Tosca.
Dax Edgar, de Edmonton, Canadá, cargaba una pesada mochila y dijo que la reanudación de los trenes le ayudaría a completar su viaje por Europa.
“Ni siquiera era consciente de que los trenes reabrían hoy. Simplemente decidí que hoy seguiría el viaje”, dijo Edgar. “Estuve en Atenas cuatro, cinco noches. Y me alegro de saber de la reapertura, desde luego. Porque los autobuses son caros”.