MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
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La demanda ha sido presentada por Marcus Silva, quien alega que las tres mujeres ayudaron a su ahora exmujer a abortar. Ella, aduce el documento recogido por Axios, decubrió que se quedó embarazada en julio de 2022, un mes después de que el Tribunal Supremo de EEUU anulara el derecho constitucional al aborto recogido en el veredicto del caso Roe v. Wade, y que concedió a los estados vía libre para imponer su propia legislación.
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Dos amigas de su exmujer la escribieron con información sobre el grupo internacional Aid Access, que facilita por correo estas pastillas. Una tercera demandada entregó la medicación, de acuerdo con el texto jurídico.
La demanda entiende que, según las restricciones que pesan en Texas, la obtención de pastillas abortivas podría representar un delito, si bien las tres mujeres no han sido objeto de acusación criminal. Además, el caso es complejo porque el aborto ocurrió en julio, pero la prohibición estatal no entró en vigor hasta finales de agosto.
Además, la ley texana tampoco es especialmente clara. Si bien estipula que, en el peor de los casos, la provisión de elementos que faciliten la interrupción del embarazo podría ser considerado como un delito punible con hasta cadena perpetua, no menciona explícitamente que el aborto sea un asesinato, según apunta el portal.