Los Cowboys de Dallas le dieron la etiqueta de jugador franquicia a Tony Pollard y aún esperan alcanzar un acuerdo a largo plazo con el corredor que tuvo una temporada de revelación.
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Si Pollard firma, su contrato por un año podría valer 10,1 millones de dólares. Los Cowboys y el corredor, que acababa de terminar su contrato de cuatro años de novato, tienen hasta el 15 de julio para llegar a un acuerdo a largo plazo. La etiqueta fue dada un día antes de la fecha límite.
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Pollard se convirtió en el armador de la ofensiva de los Cowboys y fue elegido al Pro Bowl la temporada pasada. Corrió para 1.007 yardas y nueve touchdowns, atrapando 39 pases para 371 yardas y otras tres anotaciones en la campaña regular.
Se fracturó la fíbula izquierda y sufrió un esguince en el tobillo derecho en una tacleada en la derrota 19-12 en el duelo divisional de la Conferencia Nacional ante San Francisco. Se sometió a una operación y se espera que esté listo para el campamento.
Los Cowboys podrían ahorrarse espacio salarial si cortan a Ezekiel Elliot, quien deberá ganar 10,9 millones la próxima temporada, debido a que superaron el salario máximo por 16,7 millones. Hay indicios de que el corredor elegido tres veces al Pro Bowl podría aceptar recortar su salario para seguir con el equipo.
Elliott se perdió dos encuentros esta temporada por una lesión de rodilla y terminó con un mínimo de carrera de 876 yardas por tierra. Aún así corrió para 12 anotaciones y empató su mayor cantidad de anotaciones por tierra desde que tuvo 15 como novato en 2016.
Pollard, quien cumple 26 años el 30 de abril, fue elegido en la cuarta ronda en 2019. Tiene un promedio de 5,1 yardas por acarreo, corriendo para 2.616 yardas y 17 touchdowns en 62 encuentros (seis como titular) con los Cowboys. Tiene 121 atrapadas para 1.007 yardas y cinco anotaciones.
