MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
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El país también ha subido hasta un 36 por ciento los impuestos sobre los ingresos en una decisión que el propio FMI ha descrito como necesaria dado que el país llevaba décadas por debajo de los estándares internacionales en este sentido, según la nota recogida por el portal de noticias ceilandés NewsCutter.
"Los esfuerzos para aumentar los ingresos fiscales deben llevarse a cabo de manera favorable al crecimiento y al mismo tiempo proteger a los pobres y los más vulnerables", ha explicado FMI. "Sin embargo, también es importante que aquellos que más pueden permitírselo hagan contribuciones proporcionales a la financiación de los gastos gubernamentales necesarios", ha añadido la institución.
Queda por saber la postura que adoptará China, el mayor acreedor del país, cuya negativa a reestructurar la deuda ha provocado la paralización del préstamo de aproximadamente 2.700 millones de euros imprescindible para reimpulsar la economía nacional.
De hecho, este mismo viernes, el gobernador del Banco Central, Nandalal Weerasinghe, ha expresado su deseo de que el país esté listo para adoptar el programa del FMI este mismo mes, antes de recordar que estas subidas de impuestos son fruto de un consenso que reduce las cifras inicialmente estipuladas a este respecto.
El Gobierno ceilandés también ha subido los impuestos a la electricidad en medio de un ambiente, de nuevo, cada vez más caldeado después de que este pasado miércoles, alrededor de 2.000 trabajadores portuarios efectuaran una breve protesta para pedir un régimen fiscal más justo en un país donde la inflación se ha disparado por encima del 50 por ciento, existe una falta de reservas de divisas, la moneda se está desplomando y la recesión sigue en aumento.