BERLÍN (AP) — Decenas de miles de juerguistas bailaron el jueves en las calles de Colonia, Düsseldorf, Bonn y otras ciudades y pueblos de Renania al celebrar el tradicional inicio del Carnaval en Alemania.
Vistiendo colores brillantes y disfraces creativos, cantaron en voz alta y se balancearon al ritmo de canciones familiares de bandas de música compuestas por instrumentos de metal y música folclórica, y bebieron mucha cerveza.
Es la primera vez desde el inicio de la pandemia que el Carnaval se celebra en Alemania sin restricciones por el coronavirus.
El primer día del Carnaval en Alemania también se dedica tradicionalmente a que las mujeres tomen el poder en los ayuntamientos de Renania durante un día. Simbólicamente les quitan las llaves a los alcaldes —en su mayoría hombres— y les cortan las corbatas y los cordones de los zapatos a cambio de besos.
En Düsseldorf, mujeres de la tercera edad disfrazadas conocidas como Moehnen irrumpieron en el ayuntamiento a las 11:11 de la mañana, de acuerdo con la agencia de noticias alemana dpa.
“Durante dos años tuviste tu paz, pero hoy todo se trata del poder de las mujeres. Queremos el poder”, gritó la princesa del carnaval, Uasa Maisch. “Les cortaremos las corbatas. Queremos entrar”.
Tan solo en Colonia se esperaban decenas de miles de personas para las festividades. La policía desplegó más de 2.000 agentes y el ministro del Interior de Renania del Norte-Westfalia, donde se encuentra Colonia, advirtió a los juerguistas que no beban demasiado “Koelsch” —la típica cerveza color miel de Colonia.
“Todo el mundo debería saber cuándo ha bebido suficiente Koelsch”, dijo Herbert Reul al diario de Colonia Koelner Stadt-Anzeiger.
Por su parte, el Ministerio señaló que “es importante que haya días en que uno se pueda desconectar durante unas horas y dejar las preocupaciones a un lado” cuando muchas personas sienten preocupación por la guerra y la inflación.
Alrededor del mediodía, la policía de Colonia bloqueó el barrio de Zuelpicher Viertel porque estaba saturado de gente, informó dpa. No se permitió el ingreso de más juerguistas al distrito cercano a la principal universidad de la ciudad, el cual cuenta con muchos bares y pubs populares.