BRUSELAS, 6 (EUROPA PRESS)
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Aunque no hay confirmación oficial de la visita y la agenda de los líderes de la UE no se ha comunicado aún, distintas fuentes europeas consultadas por Europa Press alegan "razones de seguridad" para evitar una respuesta directa y explicar que no pueden "ni confirmar ni desmentir" la información.
De esta forma, los líderes de los Veintisiete esperan al presidente ucraniano tan solo una semana de que la plana mayor de Bruselas se desplazara a Kiev para una doble jornada de encuentros, primero la reunión entre una quincena de comisarios y el gobierno ucraniano y luego la cumbre UE-Ucrania, que reunió a Zelenski con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell.
Preguntado ese día por una futura visita a Bruselas, el presidente de Ucrania aseguró que un eventual viaje era "inevitable" pero explicó que existe un "riesgo significativo" a la hora de realizar viajes al extranjero.
En este sentido, admitió haber discutido esta opción con Michel. "Quiero viajar, realmente quiero hacerlo pero hay riesgos porque Rusia puede preparar una ofensiva", expuso.
VIAJE A WASHINGTON EN DICIEMBRE
El de Bruselas sería el segundo viaje al extranjero de Zelenski desde el inicio de la invasión rusa hace casi un año. El presidente de Ucrania concedió a Estados Unidos el gesto de una primera visita, de la que sólo se tuvo confirmación oficial unas horas antes por razones de seguridad.
La visita a Washington del 22 de diciembre estuvo rodeada de estrictas medidas de seguridad e incluyó, además de una reunión formal en la Casa Blanca con el presidente estadounidense, Joe Biden, un discurso ante el Congreso durante una sesión extraordinaria que reunió a legisladores de las dos cámaras.
Zelenski abandonó Washington con compromisos explícitos de más ayuda bajo el brazo y, desde entonces, las autoridades ucranianas siempre habían dejado en el aire la posibilidad de una segunda salida, en esta ocasión a Bruselas, tras las sucesivas visitas a Kiev de altos cargos europeos.