BAMAKO, Mali (AP) — Atentados coordinados de extremistas islámicos dejaron 14 soldados muertos y casi una docena de heridos, dijo el ejército de Mali.
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Múltiples artefactos explosivos improvisados estallaron entre las localidades de Dia y Diafarabe, además de entre Koumara y Macina, en el centro del país, dijo el coronel Souleymane Dembele, director de relaciones públicas del ejército, en un comunicado el miércoles.
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Durante los ataques, que ocurrieron a principios de semana, las fuerzas de Mali mataron a más de 30 “terroristas”, agregó Dembele.
La nación del África Occidental lleva una década azotada por la violencia ligada a los grupos extremistas Al Qaeda y Estado Islámico. Miles de personas han perdido la vida en este tiempo.
La junta militar que gobierna el país, que tomó el poder en dos golpes de Estado desde 2020, ha tenido problemas para hacer retroceder a los yihadistas, especialmente desde la retirada de las tropas francesas en agosto por las tensas relaciones con el nuevo gobierno. Francia estaba presente en la región desde 2013, cuando envió tropas a Mali para frenar a los extremistas que rodeaban la capital, Bamako, pero los radicales se han reagrupado desde entonces.
Desde diciembre de 2021, la junta trabaja con mercenarios rusos del Grupo Wagner, que tampoco han conseguido frenar la violencia. En agosto, 42 soldaron fueron asesinados en un ataque a su cuartel.
“Los grupos extremistas siguen sembrando el caos en la región saheliana a pesar de que la junta emplea mercenarios para frenar el aumento de la violencia. Está claro que no está funcionando", dijo Laith Alkhouri, director general de Intelonyx Intelligence Advisory, que ofrece análisis de inteligencia.
“El elevado conteo de víctimas pone de manifiesto el incansable esfuerzo de los grupos extremistas para debilitar cualquier resto de determinación de los soldados malienses. Si hay más ataque de este tipo, la junta tendrá que recurrir a ayuda adicional de seguridad", agregó el analista.
