DUBAI (AP) — Irán liberó el miércoles a una actriz ganadora de un Oscar, casi tres semanas después de encarcelarla por expresar su apoyo a las protestas antigubernamentales, según informes locales.
La agencia de noticias semioficial ISNA informó que Taraneh Alidoosti, de 38 años, fue puesta en libertad bajo fianza. Poco antes, en una publicación en Instagram, su madre Nadere Hakimelahi informó que sería liberada.
Alidoosti, ganadora del Oscar por la película “El Cliente” de Asghar Farhadi, fue una de varias celebridades iraníes que expresaron su apoyo a las protestas en todo el país y criticaron la violenta represión de las autoridades contra la disidencia. Publicó al menos tres mensajes en apoyo de las protestas en Instagram antes de que su cuenta fuera desactivada.
En un mensaje expresó su solidaridad con el primer hombre ejecutado por cargos relacionados con las protestas, que se desencadenaron en septiembre tras la muerte de una mujer bajo custodia policial y se han convertido en llamados generalizados para el derrocamiento del gobierno clerical.
Las movilizaciones han sido uno de los mayores desafíos para la República Islámica desde que se estableció después de la revolución de 1979, y han provocado una fuerte represión por parte de las fuerzas de seguridad, que han utilizado munición real, perdigones y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, según grupos de derechos humanos.
Los activistas dicen que al menos una decena de personas han sido sentenciadas a muerte en audiencias a puerta cerrada por cargos relacionados con las protestas.
Al menos 516 manifestantes han muerto y más de 19.000 personas han sido arrestadas, según Human Rights Activists in Iran. Las autoridades no han facilitado un recuento oficial de las personas muertas o detenidas.
Las protestas comenzaron a mediados de septiembre, cuando Mahsa Amini, de 22 años, murió después de ser arrestada por la policía moral por presuntamente violar el estricto código de vestimenta. Las mujeres han desempeñado un papel destacado en las protestas, y muchas se han quitado públicamente el velo islámico o hiyab.