SEÚL (AP) — El presidente surcoreano pidió el martes reforzar la defensa aérea del país y hacer uso de drones furtivos de alta tecnología para monitorear mejor a Corea del Norte, un día después que Seúl acusó a Pyongyang de autorizar que cinco drones cruzaran la tensa frontera entre ambos países por primera vez en cinco años.
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En respuesta al ingreso de los drones norcoreanos al espacio aéreo de Corea del Sur, el ejército surcoreano realizó disparos de advertencia antes de movilizar aviones de combate y helicópteros de ataque, pero no se confirmó si alguno de los drones de Corea del Norte fue derribado. Eso ha planteado serias dudas sobre la red de defensa aérea de Corea del Sur en un momento en que las tensiones siguen altas por la tórrida serie de pruebas de misiles de Corea del Norte este año.
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“Tenemos un plan para crear una unidad militar de drones encargada de monitorear instalaciones militares clave en Corea del Norte. Pero debido al incidente de ayer, seguiremos adelante con la creación de la unidad de drones lo antes posible”, dijo el presidente Yoon Suk Yeol durante una reunión del Consejo de Gabinete. “También presentaremos drones furtivos de última generación y reforzaremos nuestra capacidad de vigilancia”.
Añadió que el ejército surcoreano necesita una preparación y ejercicios más intensivos para hacer frente a las amenazas planteadas por los drones de Corea del Norte. Yoon, un conservador que asumió el cargo en mayo, dijo que el ejército de Corea del Sur ha realizado poco entrenamiento de este tipo desde 2017, cuando asumió su predecesor liberal, Moon Jae-in.
En un aparente esfuerzo por culpar del supuesto sistema de defensa aérea laxo a la política de compromiso de Moon con Corea del Norte, Yoon dijo: “Creo que nuestra gente debe haber visto claramente cuán peligrosa sería una política de Corea del Norte que se base en la buena fe y los acuerdos (de paz) del Norte”.
De momento, Moon o sus aliados no han respondido a las declaraciones de Yoon.
A Moon se le atribuyó la organización de una diplomacia ahora inactiva sobre el programa nuclear de Corea del Norte, pero también enfrentó críticas de que su política de relajamiento permitió al gobierno norcoreano ganar tiempo y aumentar su capacidad nuclear ante las sanciones internacionales.
Fue la primera vez que drones norcoreanos ingresan al espacio aéreo de Corea del Sur desde 2017, cuando un dron de Corea del Norte se estrelló en territorio surcoreano. Funcionarios militares de Corea del Sur dijeron en ese momento que el dron fotografió un sistema de defensa antimisiles estadounidense en Corea del Sur.
Corea del Norte ha pregonado previamente su programa de drones, y autoridades de Corea del Sur afirman que el Norte cuenta con alrededor de 300 drones. En 2014, varios presuntos drones norcoreanos fueron hallados al sur de la frontera. Los expertos dijeron que se trataba de drones de baja tecnología pero que podrían ser considerados una potencial amenaza para la seguridad de Corea del Sur.
El pasado viernes, Corea del Norte disparó dos misiles balísticos de corto alcance hacia sus aguas orientales, según el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur. El lanzamiento fue considerado como una protesta por los simulacros aéreos conjuntos de Corea del Sur y Estados Unidos que el gobierno norcoreano considera un ensayo de invasión.
Este año, Corea del Norte ha realizado una cantidad sin precedentes de pruebas de misiles en lo que algunos expertos llaman un intento de mejorar sus armas y presionar a sus rivales para que hagan concesiones, como el levantamiento de sanciones en futuras negociaciones. Recientemente, Corea del Norte también afirmó haber realizado importantes pruebas necesarias para adquirir su primer satélite espía y un misil balístico intercontinental más móvil capaz de llegar a Estados Unidos continental.