MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
Tras caer el pasado viernes en el Parque de los Príncipes ante el Paris Saint-Germain francés, el conjunto que entrena Alberto Toril se despidió de la máxima competición continental, sin poder ni siquiera tener opciones en esta última jornada, donde tampoco su rival se juega nada.
El equipo madridista no ha podido superar el reto que suponía este Grupo A, 'el de la muerte' por tener también al potente Chelsea inglés, y optar a repetir los brillantes cuartos de final de la pasada temporada en la que debutaba en la Champions. Ahora, su obligación es la de poner el cierre hasta el año que viene con buena imagen.
El Real Madrid no debería tener excesivos problemas para deshacerse del Vllaznia, al que ya batió en la primera jornada de la competición por 0-2, aunque el resultado pudo ser más abultado. El conjunto madrileño es teóricamente muy superior y espera mantenerse al menos invicto en un Alfredo Di Stéfano donde no pudieron ganar ni Chelsea ni PSG.
Tras la derrota en París, el equipo madridista no tuvo jornada en la Liga F, por lo que llega 'descansado' a este duelo donde Alberto Toril podría aprovechar para hacer rotaciones y dar minutos a jugadoras como Nahikari García, Tere Abelleira, Maite Oroz, Caroline Möller, Lucía Rodríguez o la guardameta Méline Gérard para batir a un conjunto albanés que tendrá la motivación de intentar estrenar tanto su casillero de puntos como de goles. Chelsea (8-0) y PSG (5-0) apenas le dieron opciones como visitante.