MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
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La organización ha indicado que las autoridades dirigidas por los kurdos tienen a los detenidos, la mayoría niños, junto con miles de sirios en condiciones inhumanas, cuyo estado se ha agravado tras los recientes ataques turcos en el marco de la operación 'Garra Espada'.
"Los ataques de Turquía resaltan la necesidad urgente de que todos los gobiernos ayuden a poner fin a la detención ilegal de sus ciudadanos en el noreste de Siria, permitiendo que todos regresen a casa y enjuiciando a los adultos según corresponda", ha declarado la directora adjunta de crisis y conflictos de HRW, Letta Tayler.
"Por cada persona traída a casa, unas siete permanecen en condiciones desmesuradas, y la mayoría son niños", ha remarcado Tayler.
A pesar de este empeoramiento de la situación, la ONG ha lamentado que antes de los ataques varias personas habían muerto en campos de refugiados y prisiones, donde se encuentran personas de unos 60 países.
Ninguno de los extranjeros ha sido llevado ante una autoridad judicial en el noreste de Siria para determinar la necesidad y legalidad de su detención, lo que hace que su cautiverio sea arbitrario e ilegal. La detención basada únicamente en los lazos familiares equivale a un castigo colectivo, un crimen de guerra, denuncia la ONG, que ha criticado las actuaciones de los gobiernos.
"Los gobiernos que a sabiendas y de manera significativa contribuyen a este confinamiento abusivo pueden ser cómplices de la detención ilegal de extranjeros", recoge un comunicado de la organización, que advierte de que la detención ilegal sistemática podría constituir un crimen de lesa humanidad.
En este sentido, HRW ha recordado los estándares legales internacionales, criticando varias sentencias sobre violaciones de numerosos derechos de mujeres y niños que no habían sido repatriados a Francia o Finlandia, que incluía el derecho a no ser tratado de forma inhumana, el derecho a la vida o a la examinación de sus solicitudes de forma justa.
También ha rememorado alguna de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que destaca la importancia de promover la rehabilitación y reintegración para ayudar a mujeres y niños asociados con grupos como Estado Islámico que pueden ser víctimas de terrorismo.
La organización ha pedido a los países que repatrien o ayuden a traer a su país de origen a los detenidos, dando prioridad a los más vulnerables, incluidos niños y madres, ya que no tienen atención médica, agua potable, vivienda o educación adecuadas.
Asimismo, ha instado a las entidades de Naciones Unidas y otras organizaciones a que trabajen para reasentar de manera segura a los extranjeros que enfrentan riesgos de muerte o tortura.
Además, ha señalado la necesidad de crear procesos judiciales junto a las autoridades sirias para permitir que los extranjeros impugnen de manera justa su detención, permitiendo la liberación inmediata de los inocentes.