BRUSELAS (AP) — La Unión Europea estaba más cerca el martes de introducir un impuesto sin precedentes a las empresas extrajeras que quieran importar productos que no cumplan los estándares de protección climática a las que están sujetas las compañías de la UE.
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El acuerdo entre el Parlamento Europeo y los 27 estados miembros aún no estaba completo, pero acercaba la implementación de la norma. Como algunos aspectos del impuesto, conocido como Mecanismo de Ajuste Fronterizo de Carbono, están asociados a otras carteras, no puede alcanzarse una decisión total sobre el impuesto hasta más tarde.
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El impuesto intenta crear un terreno igualado tras las quejas de empresas comunitarias sobre que cumplir los objetivos climáticos les suponía gastos adicionales mientras sus competidores internacionales simplemente importaban productos sin esas limitaciones y dejaban a los productores locales fuera del mercado con sus precios más bajos.
“Esto garantizará un tratamiento equilibrado de estas importaciones y está diseñado para instar a nuestros socios en el mundo a unirse a los esfuerzos climáticos de la UE”, indicó el ministro checo de Industria, Jozef Síkela.
“Sólo los países con la misma ambición climática que la UE podrán exportar a la UE” sin verse afectados por el gravamen, señaló el Parlamento Europeo en un comunicado. “Por lo tanto, las nuevas normas garantizarán que la UE y los esfuerzos climáticos globales no se ven socavados por la deslocalización de la producción de la UE a países con políticas menos ambiciosas”.
