MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
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"La personalidad de un grupo suele ser la de su líder y en este equipo se puede ver muy reflejado el liderazgo, la forma de trabajar y el no dar nunca una carrera por perdida de Luis Enrique, y eso es lo que se ve en el ambiente en el día a día", advirtió Joaquín Valdés, invitado este martes en el 'streaming' del seleccionador nacional.
El psicólogo reconoció que aporta "un granito de arena importante" a la hora de que exista un buen ambiente, "pero no más que cualquier otro compañero del 'staff' o del servicio médico". "Esto hace que haya un ambiente que se retroalimenta y donde el principal artífice es Luis Enrique", recalcó.
Valdés, del que el asturiano recordó que es la "única persona" del 'staff' que lleva con él desde que empezó su carrera en los banquillos, señaló que a diferencias de psicólogos clínicos o sociales, uno de la rama deportiva "básicamente trabaja con individuos sanos" y tiene como "objetivo optimizar el rendimiento".
"La figura del psicólogo en el deporte se asociaba a que el deportista tuviese un problema clínico y no tiene nada que ver. Puedes estar perfectamente bien, pero trabajar a nivel psicológico para mantener ese nivel adecuado a base de asociar diferentes situaciones con diferentes momentos y conductas", añadió.
Valdés habló también de cómo puede afectar una lesión a nivel psicológico. "Hay una fase de impacto emocional y tenemos que permitirle al deportista que pase ese pequeño duelo, basta con estar al lado. Se ha roto un objetivo y la motivación se viene abajo, hay que replantear uno nuevo, que no va a ser tan atractivo, y empezar a trabajar. Es importante no hablar solo de largo plazo sino de pequeños hitos que te hagan motivarte y los objetivos deben ser realistas", detalló.
El psicólogo también dejó claro que cumple rigurosamente el "secreto profesional". "Si no fuese por esto no estaría aquí. Lo primero que le dije a Luis es que para trabajar bien habría cosas que no podría trasladarle porque perdería la confianza del jugador", reconoció.
Además, relató que en el "momento importante de espera antes de un partido hay que desviar la atención para que el jugador pase ese espacio de tiempo de la forma más agradable posible" y recordó que en lo relativo a los egos, "los hay hasta en cualquier equipo de juveniles de barrio". "Cuanto más alto es el nivel, más difícil es de gestionar y por eso no puede cualquiera entrenar a un equipo de alto nivel", puntualizó.
Valdés tampoco se olvidó de advertir de la "importancia de controlar las redes sociales". "Es satisfactorio leer cosas buenas, pero no vas a dejar de leerlas cuando no sean tan buenas y a nadie le gusta que hablen mal de él. Le hemos dado el poder a alguien anónimo de influir en nosotros", manifestó.
El psicólogo deportivo confesó que trabaja también con "diferentes estrategias" de cara a las tandas de penaltis en eliminatorias y dejó claro que no son "una lotería". "Se puede influir psicológicamente y pueden mejorar el rendimiento", subrayó.
Además, reconoció que se ha encontrado con jugadores "de gran nivel", pero que preferirían tener "otro trabajo" y que "los deportistas de alto nivel son inconformistas y casi siempre son infelices", mientras que aclaró que no trabaja la hipnosis "como tal" y que no es "como la de las películas, que es magia". "Sí tengo herramientas de trabajo de la imaginación o de reconstrucción cognitiva", afirmó Valdés, que ve al tenis o al golf como dos de los deportes que "más exigencia mental requieren" y que ha trabajado con árbitros, "pero no a nivel individual".