MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
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La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha asegurado sentirse "abrumada" por los apoyos recibidos tras el ataque de Vox en el Congreso de los Diputados que, según ha asegurado, "ha pasado algunos límites".
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"Es una campaña de destrucción personal para deslegitimar la lucha feminista", ha asegurado Montero en una entrevista en la Cadena Ser recogida por Europa Press en la que ha reconocido que la bronca que provocó en el Congreso las manifestaciones de Carla Toscana acusándola de "libertaria de violadores" y reprochándole que su "único mérito" para ostentar su cargo era "haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias", le hicieron sentir "emocionada y muy rabiosa".
Montero ha asegurado sentirse "arropada" y "con mucha fuerza" pero ha precisado que, para que la diputada de Vox "pasara ese límite, antes había muchas otras personas que lo estaban rozando". "Entonces es fácil que alguien se crea que puede saltárselo", ha añadido la ministra.
Y, ante esto, ha pedido "reflexionar": "La violencia política no es que alguien se levante y diga una barbaridad, sino que ha habido durante más de una semana una campaña que, desde sectores incluso progresistas, decían que éramos una inútiles, que nos manda un macho alfa, que no sabíamos hacer leyes y al final se creen con suficiente legitimidad para pasar ese límite". Por ello, considera que el "ahora, lo importante es preguntarse cómo se ha podido llegar a saltarse ese límite".
En su opinión, "lo que se está desarrollando, también por parte de los poderes mediáticos, son campañas de destrucción personal para que a las feministas y demócratas no les merezca la pena hacer política y para deslegitimar la lucha feminista".
Sobre la ley del 'solo si es sí' que generó ayer la bronca en el Congreso, ha reconocido que es necesario hacer "autocrítica", aunque ha pedido distinguir entre quienes "ejercen violencia política y quienes la reciben". "No se puede ser equidistante", ha asegurado. En su opinión, "eso no quiere decir que quien recibe la violencia tenga que ser perfecta o no pueda cometer errores" y ha advertido de las consecuencias de esa violencia política. En ese sentido, ha puesto como ejemplo de ello la presión ejercida sobre anteriores ministras socialistas como Bibiana Aido y Leyre Pajín.
"El problema no es que me lo hagan a mi, es que la anterior ministra de Igualdad (Bibiana Aido) está viviendo fuera de España y ha sido injustamente tratada y lo mismo le pasó a Leire Pajín; tenemos que afrontar como sociedad el hecho de que a las mujeres se nos agreda por hacer política para que no vuelva a ocurrir", ha indicado Montero que ha hecho hincapié en la necesidad de "tomar conciencia de que no se puede ser equidistante entre el agresor y quien recibe esa violencia y sobre todo proteger al movimiento feminista".
VE AL PP "CÓMPLICE" DEL ATAQUE
En otra entrevista en RAC 1, recogida por Europa Press, Montero ha señalado a Vox como "cómplice" del ataque de Vox. "No me olvido que el PP ha usado muchas veces estos argumentos", ha lamentado en una entrevista. En esta línea, ha lamentado que la intervención de la formación durante el Pleno "no sobrepasó los límites de la diputada fascista de Vox pero estuvo muy cerca".
Ha agradecido los aplausos recibidos de parlamentarios de Unidas Podemos, PSOE, ERC, Bildu y otras formaciones --a los que la ministra se ha referido como la mayoría feminista del Congreso-- y ha considerado que ello demuestra que tienen "objetivos comunes en defensa de los derechos feministas y de la democracia".
Montero ha vuelto a defender la solvencia de la Ley de Garantía de Libertad Sexual y ha insistido en que los críticos "están generando una alarma social injustificada", al tiempo que ha rechazado dimitir.