Nueve personas perdieron la vida, entre ellas cuatro mujeres, después de que hombres armados irrumpieron a tiros en un bar en Guanajuato, México, un estado azotado por la violencia, informaron las autoridades el jueves.
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Con esta es la tercer masacre de este tipo en un centro nocturno de Guanajuato, donde un grupo criminal local se disputa el territorio contra el Cártel de Jalisco, surgido en el estado vecino.
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El modus operandi en estos ataques es que los asaltantes simplemente llegan a detonar sus armas contra todos los presentes en los bares, incluido los trabajadores de los establecimientos.
En el ataque del miércoles por la noche en la localidad de Apaseo el Alto, los agresores dejaron carteles escritos a mano en el suelo ensangrentado. Los mensajes estaban firmados por la pandilla Santa Rosa de Lima, cuyo líder, ahora preso, le apodan “El Marro”.
Los mensajes parecían acusar a los dueños de los bares de apoyar al Cártel de Jalisco.
El gobierno municipal de Apaseo el Alto dijo que otras dos mujeres resultaron heridas, pero se encuentran estables.
En octubre, una docena de personas, seis de ellas mujeres, fueron asesinadas en un ataque a un bar en otra ciudad de Guanajuato. Un ataque similar a un bar en otra localidad que dejó diez muertos en septiembre.
David Saucedo, analista de seguridad radicado en Guanajuato, dijo que los ataques estaban dirigidos contra bares específicos, cuyos dueños posiblemente se negaron a pagar por protección o vender drogas de pandillas rivales, pero fueron indiscriminados una vez que se seleccionaron los objetivos.
“Algunos ataques han ocurrido para asesinar narcomenudistas, halcones o integrantes de cárteles enemigos, que se están divirtiendo en bares y centros nocturnos. Pero se convierten en masacres porque también matan a meseros y comensales”, indicó Saucedo.
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Hay indicios de que el conflicto en Guanajuato, el estado más violento de México, se ha convertido en una lucha de poder entre los dos cárteles de la droga más poderosos de México.
El Cártel de Sinaloa ahora parece estar respaldando a Santa Rosa de Lima contra el Cártel de Jalisco.