MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
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"(Actuamos) en respuesta a los homicidios ilegítimos de al menos ocho personas cometidos anoche por las fuerzas de seguridad de Irán cuando volvieron a abrir fuego contra dolientes y manifestantes en al menos cuatro provincias y basándonos en los crecientes llamamientos internacionales para un mecanismo de la ONU", ha dicho la directora de AI para Oriente Próximo y el norte de África, Heba Morayef.
En este sentido, ha explicado que este "uso imprudente e ilegal de las armas de fuego" revela, "una vez más", el "coste trágicamente alto de la inacción internacional", tras lo que ha instado a tomar "medidas decisivas" y convocar una sesión especial en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
"Si no se actúa con decisión, las autoridades iraníes se animarán a tomar más medidas enérgicas contra los dolientes y los manifestantes que se reunirán en los próximos días durante las conmemoraciones que marcan 40 días desde las primeras muertes después de que comenzara la represión mortal a mediados de septiembre", ha sentenciado en un comunicado.
Así, ha explicado que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU tiene que dejar claro a Irán que "sus crímenes no quedarán sin investigar", pese a que, tras estos "homicidios ilegítimos", haya fracasado de forma "continua" la promulgación del mecanismo especial iraní para brindar justicia a las víctimas de la represión.
"El fracaso continuo en la promulgación de dicho mecanismo, a pesar de los homicidios ilegítimos generalizados de manifestantes desde las protestas nacionales de diciembre de 2017 a enero de 2018, es indicativo de cómo estas tragedias brutales en Irán aparentemente se han normalizado", ha zanjado.
Tanto el miércoles como a lo largo de la jornada de este jueves, las fuerzas de seguridad iraníes han reprimido a los manifestantes que han salido a las calles en las provincias de Kurdistán, Azerbaiyán Occidental, Kermanshah y Lorestán.
Cientos de personas se reunieron el miércoles junto a la tumba de Masha Amini, en el cementerio de Aichi, en la ciudad iraní de Saqqez, para protestar contra el Gobierno, mientras que grupos de activistas convocaron manifestaciones en varios puntos del país, entre ellos la calle Shariati de Teherán, la capital, y sus principales plazas.
La población de Mahabad, que se encuentra en el oeste del país y es de mayoría kurda, también congregó a manifestantes e incluso irrumpió en la oficina del gobernador de Mahabad para protestar por la muerte de Ismail Moloudi, un joven que murió a manos de los agentes de la Guardia Revolucionaria durante el último día de manifestaciones.