NUEVA YORK (AP) — Un jurado apoyó a Kevin Spacey el jueves, en una de las demandas que descarrilaron la carrera del popular actor, al concluir que no abusó sexualmente de Anthony Rapp, de entonces 14 años, cuando ambos eran actores relativamente desconocidos de Broadway en la década de 1980.
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El veredicto en el juicio civil se alcanzó muy rápidamente. Los miembros del jurado de Nueva York deliberaron por un poco más de una hora antes de concluir que Rapp no había demostrado sus acusaciones.
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Cuando se leyó el veredicto, Spacey agachó la cabeza y después abrazó a sus abogados. No habló con los reporteros al salir de la corte.
“Estamos muy agradecidos con el jurado por ver más allá de esas falsas acusaciones”, dijo su abogada Jennifer Keller.
“Lo que sigue para el señor Spacey es que se demostrará que es inocente de todo lo que ha sido acusado. Que no había verdad en ninguna de las acusaciones”, agregó, en referencia a otras demandas por una conducta sexual inapropiada interpuestas contra el actor, incluyendo cargos penales en Inglaterra.
Durante el juicio Rapp testificó que Spacey lo había invitado a su apartamento para una fiesta, después se acercó a él ebrio en una habitación cuando otros invitados se habían marchado. Declaró que el actor, de entonces 26 años, lo cargó y se recostó sobre él brevemente en una cama.
Rapp testificó que logró liberarse y escapó, mientras Spacey ebrio le preguntaba si estaba seguro de irse.
En su testimonio, en el que hubo lágrimas por momentos, Spacey dijo al jurado que el encuentro nunca ocurrió y que él nunca se habría sentido atraído a alguien de 14 años.
Rapp pedía 40 millones de dólares de indemnización.
Rapp y sus abogados también salieron de la corte sin hablar con los reporteros. En sus argumentos finales al jurado el jueves, el abogado de Rapp, Richard Steigman, acusó a Spacey de mentir en el estrado.
“Carece de credibilidad”, dijo Steigman. “A veces la simple verdad es mejor. La simple verdad es que esto ocurrió”.
Rapp, de 50 años, y Spacey, de 63, testificaron a lo largo de varios días en el juicio de tres semanas.
Las acusaciones de Rapp y de otros interrumpieron abruptamente lo que había sido una carrera deslumbrante para el actor galardonado con dos Premios de la Academia, quien terminó por perder su trabajo en la serie de Netflix “House of Cards” y vio perdidas otras oportunidades. Rapp es un actor regular en “Star Trek: Discovery” y fue parte del elenco original de “Rent” en Broadway.
Spacey enfrentó cargos en Massachusetts por supuestamente haber toqueteado a un hombre en un bar — pero esas acusaciones fueron retiradas por los fiscales.
Hace tres meses se declaró inocente en Londres de cargos de agresión sexual contra tres hombres entre 2004 y 2015 cuando era el director artístico del teatro Old Vic en la capital británica.
Un juez en Los Angeles aprobó a mediados de año la decisión de un arbitrador para ordenar a Spacey pagar 30,9 millones de dólares a los creadores de “House of Cards” por violar su contrato al acosar sexualmente a miembros del equipo de producción.
The Associated Press no suele nombrar a las personas que alegan haber sufrido abusos sexuales a menos de que denuncien públicamente como lo ha hecho Rapp.
En el juicio, Spacey testificó que estaba seguro de que el encuentro con Rapp nunca ocurrió, en parte porque vivía en un estudio en vez de un apartamento con una habitación, como lo describió Rapp, y que nunca tuvo reuniones más allá de una fiesta al comenzar a vivir en ese estudio.
“Sé que no habría tenido ningún interés sexual en Anthony Rapp o ningún menor de edad, eso lo sé”, afirmó al jurado.
Durante sus argumentos finales, Keller sugirió al jurado algunos posibles motivos por los que Rapp pudo haber inventado el encuentro.
Era posible, señaló, que Rapp inventó el encuentro basado en su experiencia actuando en “Precious Sons”, una obra en la que el actor Ed Harris carga al personaje de Rapp y se recuesta sobre él, confundiéndolo brevemente con su esposa antes de descubrir que es su hijo.
La abogada también dio a entender que Rapp sintió envidia porque Spacey se convirtió en un gran astro, mientras que Rapp tenía “papeles más pequeños en programas menos importantes” después tras su actuación revelación en “Rent” de Broadway.
“Así que aquí estamos hoy y el señor Rapp está recibiendo más atención por este juicio que lo que ha tenido en toda su vida como actor”, dijo Keller.
En dos días de testimonio, Spacey expresó arrepentimiento por un comunicado que emitió en 2017, cuando Rapp denunció públicamente por primera vez, en el que dijo que no recordaba el encuentro, pero hubiese ocurrido, “le debo la más sincera disculpa por lo que pudo ser un comportamiento ebrio profundamente inapropiado”.
Al secarse los ojos con un pañuelo desechable, Spacey dijo que había sido presionado por publicistas y abogados para enviar un comunicado empático en un momento en el que el movimiento #MeToo hizo que todos en la industria se sintieran nerviosos.
“Aprendí la lección, que es nunca disculparte por algo que no hiciste”, dijo.
También lloró cuando dijo que lamentaba haber revelado públicamente que era gay el mismo día que surgieron las acusaciones de Rapp porque algunos interpretaron su anuncio como un esfuerzo por cambiar el asunto o redirigir la atención de las revelaciones de Rapp.
Spacey habló en el juicio sobre asuntos profundamente personales, como contarle al jurado sobre su padre supremacista blanco y neonazi que lo reprendía por ser gay sólo porque le gustaba el teatro.
Spacey también le dio a la corte una probada de su poder como actor cuando imitó brevemente a su compañero de elenco en Broadway, Jack Lemon. El actor dijo que su habilidad para hacer personificaciones le había ayudado en su carrera.