CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El semestre pasado, el argentino Fernando Ortiz tuvo su primera experiencia en el timón del América y muy pronto aprendió uno de los principios más importantes en este equipo: algo menos que un título se considera un fracaso.
El “Tano” Ortiz y las Águilas procurarán dar un paso más hacia ese logro que se les ha negado desde el Apertura 2018 cuando visiten al Toluca por una de las semifinales del Apertura 2022.
En la otra llave que se disputa el jueves, Pachuca recibe al Monterrey.
Las Águilas llegan al encuentro montadas en una racha de 14 partidos sin derrotas. Trece de esos duelos han sido triunfos. Poseen el mejor ataque del campeonato con 49 goles anotados, incluyendo los 11 que le endilgaron al Puebla en los cuartos de final.
Esa fue la peor paliza en una fase final desde que se instauró el formato de liguillas en México en la década de los setenta. La diferencia de nueve anotaciones igualó, además, la marca que había impuesto Toluca con un 9-0 sobre Puebla en el Verano 2000.
“En esta institución sólo festejamos títulos, eso lo tenemos claro todos. El resto son estadísticas y logros obtenidos por los jugadores”, dijo Ortiz en una rueda de prensa. “Personalmente estoy feliz, pero sabemos cuál es el objetivo y no podemos pensar en se ha logrado sin conseguir el objetivo que es campeonar”.
América ya tuvo recientemente torneos destacados que sin embargo no concluyeron con títulos. Apenas en diciembre, con el argentino Santiago Solari al mando, las Águilas arribaron a la liguilla como líderes y favoritos sólo para perder en primera ronda ante Pachuca.
Solari fue destituido luego de un pésimo comienzo en el Clausura de este año y con Ortiz como emergente, América volvió a clasificarse a la liguilla en forma directa. Superó la primera ronda, pero en las semifinales los mismos Tuzos lo volvieron a dejar fuera.
Fue un sabor agridulce para el “Tano” Ortiz. Por un lado había hecho resurgir a los azulcremas cuando parecían eliminados en la fase regular, pero alcanzar unas semifinales y quedarse corto de un título no es festejado en su club.
Por eso no sorprende que ahora la narrativa del entrenador argentino consista en ponerle constantemente paños fríos a las emociones de los hinchas que sienten cerca la 14ta corona en su historia.
“La ilusión nadie se las puede quitar (a los hinchas), los mismos jugadores han provocado esa ilusión. Quiero decirles que desde mañana y hasta la vuelta el sábado el equipo se va a entregar al máximo para conseguir el pase a la final”, agregó Ortiz.
Para acercarse a su objetivo mayor, América antes deberá imponerse a un Toluca que ha venido de menos a más en el torneo.
Los Diablos Rojos avanzaron mediante el repechaje y en los cuartos de final mostraron una faceta camaleónica que los vuelve peligrosos: En el primer juego mostraron un poderoso ataque que le hizo cuatro goles a Santos y en el segundo una defensiva que limitó en un gol al segundo mejor ataque del torneo regular.
“No sé si es una prueba de fuego, la prueba de fuego siempre fuimos nosotros”, dijo Ortiz. “Desde la primera fecha y ahora mañana que enfrentamos la primera semifinal, nosotros siempre estamos a prueba de fuego”.
El miércoles por la noche en Toluca, viene una más.