MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
La decisión se ha tomado en medio del aluvión de críticas recibidas por la aparente pasividad exhibida por las fuerzas de seguridad durante aquella crisis.
La junta escolar ha solicitado al Departamento de Seguridad Pública de Texas la presencia de más efectivos policiales y militares mientras permanece en vigor esta suspensión. "Confiamos en que la seguridad del personal y de los estudiantes no se verá comprometida durante esta transición", ha señalado.
El teniente Miguel Hernández, quien se encargó de dirigir el departamento tras el ataque, y Ken Mueller, director de servicios estudiantiles, han sido retirados de sus puestos bajo licencia administrativa, detallan medios estadounidenses.