MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
"He comunicado a todos los pacientes que el coste del tratamiento que reciban estará cubierto por el Gobierno", ha dicho durante una rueda de prensa un día después de anunciar indemnizaciones de 50 millones de rupias (unos 3.300 euros) a los familiares de los fallecidos por lo sucedido en el estadio de Kanjuruhan.
Más tarde, tras visitar el propio estadio, el líder indonesio ha concluido que las empinadas escaleras del edificio, sumado a que no se pudieron abrir las puertas de emergencia, fueron caldo de cultivo para la tragedia, informa DPA.
"¿Están las puertas a la altura de los estándares (de seguridad)? ¿Son lo suficientemente anchas?, se ha cuestionado Widodo, quien ha ordenado al Ministerio de Obras Públicas realizar una auditoría de todos los estadios de la Liga de Fútbol de Indonesia.
"Quiero saber la raíz del problema que causó esta tragedia para que podamos obtener la mejor solución", ha aseverado el presidente de Indonesia, según recoge el diario 'The Jakarta Post'.
Asimismo, la Asociación de Fútbol de Indonesia anunció el martes la expulsión de por vida de dos empleados del club propietario del estadio. El lunes, la Policía despidió al encargado de la ciudad de Malang y otros ocho oficiales.
Al menos 37 menores se encuentran entre las víctimas mortales, según datos del Gobierno. La estampida se produjo después de que miles de seguidores invadieran el campo durante el partido.
La Policía lanzó gas lacrimógeno en un intento por controlar la multitud, si bien provocó que esta se dirigiera en masa hacia las zonas de salida del estadio, donde algunas de las puertas estaban cerradas.
Los disturbios durante los partidos de fútbol son comunes en Indonesia, donde al menos 78 personas perdieron la vida durante partidos celebrados en la década de los 90.
