MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
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Así lo ha comunicado el portavoz de la Secretaría General de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, detallando que Guterres expresa "sus sinceras condolencias" a las familias de las víctimas, así como al pueblo de Burkina Faso.
"El secretario general deplora el ataque a un convoy comercial, escoltado por las fuerzas armadas nacionales y que transportaba productos básicos, a la ciudad de Djibo, en Burkina Faso", esgrime el comunicado difundido por Dujarric.
La ONU ha pedido a las autoridades de Burkina Faso que no escatimen esfuerzos para identificar y llevar ante la justicia a los autores de este "atroz" ataque, y ha pedido a todas las partes que garanticen que los civiles no sufran las consecuencias del conflicto.
En este sentido, Guterres ha reiterado el compromiso de Naciones Unidas de seguir colaborando con el país africano y los socios internacionales para mejorar la protección de los civiles, hacer frente a los problemas humanitarios y promover una paz y una prosperidad duraderas en el respeto de los Derechos Humanos.
El pasado lunes al menos once soldados fallecieron y una treintena resultaron heridos, entre ellos un civil, después de que un convoy de suministros fuera atacado por hombres armados.
El convoy, que estaba siendo escoltado por el Ejército del país, fue el objetivo de un ataque en una carretera cercana a la localidad de Gaskindé, a unos veinte kilómetros de Djibo, en el norte del país, según informó la emisora Radio France International (RFI).
El líder de la junta militar de Burkina Faso, Paul-Henri Sandaogo Damiba, alertó ante la 77 Asamblea General de Naciones Unidas que el terrorismo en la región "pone en juego" la paz y la seguridad internacionales, ya que "ninguna medida" podrá impedir que el terrorismo se extienda si se deja solo al Sahel.
