Al menos cuatro personas que presentaban síntomas de ébola escaparon del centro médico en el que estaban ingresados en la localidad ugandesa de Mubende, días después de que las autoridades declararan un brote por la muerte de una persona que dio positivo por el virus.
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La comisionada del distrito de Madudu, Rosemary Byabashaija, indicó que “estas cuatro personas presentaban síntomas pero decidieron huir, mientras que otras tres se negaron a ser trasladadas al hospital”.
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Así, confrimó que estas dos personas se negaron al traslado “guste o no” a las autoridades. “Moriremos aquí”, trasladaron a las autoridades, según Byabashaija, quien lamentó que “la gente no cree en la enfermedad o ignora la enfermedad”.
“Hemos decidido continuar con las labores de sensibilización y hemos creado un equipo a nivel de subcondado con líderes locales (...) al considerar que la población confía en sus líderes”, explicó, según el diario ugandés ‘Daily Monitor’.
El Ministerio de Sanidad ugandés subrayó que hasta la fecha fueron detectados 43 contactos de los pacientes de ébola, si bien algunos no fueron evacuados de sus comunidades. El brote dejó hasta ahora un muerto confirmado y un segundo fallecimiento sospechoso.
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Por su parte, el Gobierno de Ruanda pidió a la población que aplique las medidas preventivas para evitar la propagación de la enfermedad y destacó que trabaja con Kampala “para fortalecer las medidas de prevención en la frontera”.
El Ministerio de Sanidad ruandés señaló en un comunicado publicado en su cuenta en la red social Twitter que “todo el mundo debe tener cautela y cumplir con seriedad con las medidas preventivas contra el ébola, que es fácilmente prevenible si uno cumple los estándares de higiene y evita las visitas y contactos innecesarios con personas que hayan viajado a zonas afectadas por el brote”.
Las autoridades de Uganda confirmaron el miércoles la muerte de un paciente que estaba bajo supervisión como supuesto caso de ébola a raíz del brote declarado el martes, lo que elevaría a dos el número de fallecidos a causa del virus.
Uganda informó de su último caso de esta cepa en 2012, mientras que en 2019 declaró un brote por la cepa Zaire, importado desde República Democrática del Congo (RDC).