SEATTLE (AP) — Al menos durante una semana, los Seahawks de Seattle se encuentran solos en la cima de la División Oeste de la Conferencia Nacional.
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Y podría ser que en ningún otro momento haya un sentimiento tan dulce para ellos como tras la victoria del lunes en la semana 1, por 17-16 ante los Broncos de Denver.
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Mientras que la atención se centraba en el retorno de Russell Wilson a Seattle como nuevo quarterback de los Broncos tras el canje en el receso de temporada, los Seahawks lograron robarle el triunfo a Denver, a pesar de que no eran favoritos.
Estuvieron presentes para atestiguar lo sucedido varios exjugadores de los Seahawks. Se trató de un pequeño reencuentro, con Richard Sherman, Doug Baldwin, Marshawn Lynch, Sidney Rice, Cliff Avril y K.J. Wright en el campo antes del partido. Todos esperaban ver qué haría Wilson en su primer duelo sin el uniforme de Seattle.
Al final, los exjugadores de los Seahawks celebraban igual que los jugadores en el vestuario.
“Fue obvio lo mucho que querían ganar el partido”, afirmó el entrenador de Seattle Pete Carroll el martes en su programa de radio en KIRO-AM.
Aunque la victoria fue celebrada de gran manera por los entrenadores, jugadores y aficionados que abuchearon a Wilson toda la noche, sigue siendo sólo un partido y los Seahawks cometieron muchos errores. No cambiaron la narrativa de que ésta sigue siendo una temporada de reconstrucción.
Pero Seattle podría ser más competitivo de lo que se esperaba, especialmente si Geno Smith sigue jugando como lo hizo en la primera mitad del duelo ante los Broncos.
“Fue otro triunfo, un gran triunfo para el equipo”, aseguró Smith. “Me gustó cómo se defendieron los chicos. Me gustó la pasión con la que jugamos y tenemos que mantener eso”.
QUÉ FUNCIONA
La defensiva de Seattle se mantuvo demasiado tiempo en el campo en la segunda mitad y permitió un total de 433 yardas. Sin embargo, su defensa en la zona roja fue sobresaliente. Denver tuvo tres posesiones ahí en la segunda mitad y sólo logró tres puntos gracias a dos balones perdidos en la línea de gol.
La línea defensiva de Seattle encabezada por Poona Ford, Al Woods y Shelby Harris fue notablemente sólida en situaciones en la línea de gol y mantuvo a ls Broncos lejos de anotar.
QUÉ FALTA
La ofensiva de Seattle en la segunda mitad fue un desastre. Los Seahawks lograron apenas 34 yardas y primeros y 10, dos de los cuales fueron gracias a penalizaciones. Smith completó 17 de 18 pases para 164 yardas en la primera mitad, pero enfrentó demasiados momentos en que necesitaba avanzar muchas yardas en la segunda mitad y no pudo sostener las jugadas.
