MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
La Dirección de Comunicación de la Presidencia burkinesa ha señalado en un comunicado publicado en su cuenta en la red social Facebook que Kaboré (2015-2022), Compaoré (1987-2014), Michel Kafando (dos etapas de transición en 2014 y 2015), Yacouba Isaac Zida (2014) y Jean-Baptiste Ouédraogo (1982-1983) "están invitados a este encuentro de alto nivel en torno a cuestiones vinculadas al interés superior de la nación".
"Este encuentro, importante para la vida de la nación, no afecta a los procedimientos judiciales contra algunos", ha manifestado, en aparente referencia a la condena contra Compaoré, quien vive exiliado en Costa de Marfil desde 2014 y regresó al país el jueves para participar en el encuentro, por su papel en el asesinato en 1987 del líder revolucionario e icono del panafricanismo Thomas Sankara en el marco del golpe de Estado en el que fue derrocado.
Damiba mantuvo el 21 de junio un encuentro con Kaboré para abordar "cuestiones de seguridad" y el proceso de transición, en medio del aumento de los ataques por parte de grupos yihadistas. En la reunión también participó el expresidente Jean-Baptiste Ouédraogo. "El encuentro entre estas tres personalidades es testigo de la voluntad de reconciliación del jefe de Estado, para un Burkina Faso unido, decidido y solidario en la lucha contra la hidra terrorista", subrayó la Presidencia de transición.
Asimismo, la junta anunció durante el fin de semana que Kaboré ha sido "totalmente liberado", tras su detención en el marco de la asonada y su paso a arresto domiciliario en abril de este año. "El Gobierno reitera su disposición a un diálogo inclusivo y a actuar para lograr el éxito de la transición", dijo el portavoz del Gobierno de transición, Lionel Bilgo, que agregó que esta decisión "se inscribe en una dinámica de refuerzo de la cohesión social y la reconciliación nacional".
El golpe de Estado fue perpetrado por Damiba tras un amotinamiento de militares en protesta por la inseguridad y la falta de medios para hacer frente al yihadismo, motivo por el que los soldados exigieron la dimisión de Kaboré y otros altos cargos de las fuerzas de seguridad.
El país africano ha experimentado en términos generales un aumento significativo de los ataques desde el año 2015, obra tanto de la filial de Al Qaeda como de la de Estado Islámico en la región. Estos ataques han contribuido también a incrementar la violencia intercomunitaria y han hecho que florezcan los grupos de autodefensa.
