Las autoridades en Connecticut pusieron bajo licencia a dos agentes policiales debido a que un hombre sufrió heridas graves en un vehículo policial y luego en una comisaría antes de que lo llevaran a un hospital con signos de parálisis.
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El subjefe de policía de New Haven, Karl Jacobson, dijo en conferencia de prensa el martes por la noche que el agente Oscar Diaz no cumplió con la norma de que se debe pedir asistencia médica y aguardar el arribo de los paramédicos cuando alguien sufre lesiones en un vehículo policial. Dijo que el detenido Richard Cox sufrió lesiones cuando Diaz frenó bruscamente para evitar un accidente.
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“A este joven le sucedió algo horrible y haremos todo lo posible para que no vuelva a suceder”, dijo Jacobson.
La policía de la ciudad dio a conocer videos la forma como trataban a Cox y dijo que se pidió a la policía estatal que investigue.
Cox, de 36 años, residente en New Haven, fue arrestado por portación de un arma el domingo. Está recibiendo tratamiento en un hospital y existe la posibilidad de que quede paralizado de manera permanente, dijo el alcalde Justin Elicker.
El miércoles, el presidente en Connecticut de la organización de defensa de los derechos civiles de los negros NAACP, Scot X. Esdaile, dijo que pedirá a las autoridades federales que investiguen cómo los agentes de New Haven trataron a Cox.
“Deben rendir cuentas porque este hombre ha quedado paralizado”, dijo Esdaile a The Associated Press.
Esdaile dijo que el caso le recuerda el de Freddie Gray en Baltimore. Gray, un hombre negro de 25 años, murió en 2015 después de sufrir una lesión en la columna vertebral cuando se encontraba esposado y con cadenas en los tobillos en un vehículo policial.
Cox, un hombre negro, estaba esposado en la parte trasera de una van policial, sin cinturón de seguridad. Cuando Diaz frenó bruscamente para evitar un accidente, Cox fue impulsado hacia adelante y se estrelló de cabeza contra una pared, dijo la policía. Una cámara registró el hecho.
Diaz siguió hasta la comisaría a pesar de que Cox pedía ayuda y decía que no podía moverse. Minutos después, Diaz detuvo el vehículo para verificar el estado de Cox, tendido en el piso.
El oficial llamó a los paramédicos, pero en lugar de esperarlos, los citó en la comisaría, dijo Jacobson.
En la comisaría, los agentes sacaron a Cox de la camioneta arrastrándolo por los pies y lo sentaron en una silla de ruedas. Luego formalizaron el arresto, lo sacaron de la silla y lo llevaron a la rastra a una celda, donde quedó tendido en el piso. Todo quedó grabado en video.
