MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
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"Las mujeres afganas se enfrentan rápidamente al peor escenario que muchos temían", ha advertido, agregando que "las autoridades de facto siguen lejos de cumplir con sus obligaciones internacionales, tanto en la política como en la práctica, de respetar y proteger los derechos de las mujeres y niñas".
Bachelet ha indicado que la situación es "crítica", ya que más de un millón de niñas no acuden a las escuelas, por lo que se las priva de un futuro. También ha hecho hincapié en la obligatoriedad de cubrirse la cara en la vía pública, así como en la recomendación de uso del burka.
Hay que recordar que un portavoz ministerial explicó a principios de mayo que las mujeres deberán cubrirse el rostro en público, ya que de lo contrario sus 'guardianes' varones serán reprendidos o convocados por las autoridades y se arriesgan incluso a acabar en prisión, según recogió la agencia Jaama.
"Continúa la aplicación de una regla estricta sobre el hiyab; existen barreras para el acceso de las mujeres al empleo, incluso para las trabajadoras de las ONG que desempeñan sus funciones; no hay oportunidades para que las mujeres participen en la vida pública y política; y su libertad de movimiento ha sido severamente restringida", ha enumerado.
En este sentido, ha subrayado que "limitar la libertad de movimiento de las mujeres impacta negativamente en casi todos los aspectos de sus vidas, incluida la capacidad de las mujeres y sus hijos para acceder y participar en los servicios de salud, los medios de subsistencia y la ayuda humanitaria".
DERECHOS HUMANOS
Los talibán y el Frente de Resistencia Nacional (FRN), el grupo armado de oposición al movimiento fundamentalista, han protagonizado durante las últimas semanas un endurecimiento de los combates en Panjshir, en el norte del país.
En este sentido, la Alta Comisionada ha señalado que "hay denuncias graves" sobre civiles expuestos a violaciones del Derecho Humanitario a raíz de los enfrentamientos en Panjshir, incluidas detenciones arbitrarias, ejecuciones extrajudiciales y tortura.
"Hago un llamamiento a ambas partes en este conflicto para que observen la moderación y respeten plenamente el Derecho Humanitario", ha subrayado, agregando que la falta de libertad en Afganistán de la sociedad civil "ha tenido un efecto paralizador en las personas y las comunidades".
Con respecto a los Derechos Humanos de la población afgana, Bachelet se ha mostrado "profundamente preocupada" por la reciente disolución de la Comisión Independiente de Derechos Humanos de Afganistán, una inquietud que ya expresó el pasado mes de mayo.
Los talibán anunciaron la disolución de cinco importantes organismos del país, entre los que está dicho organismo, así como el Alto Consejo para la Reconciliación Nacional y las secretarías generales de las dos cámaras del Parlamento de Afganistán.
La orden, firmada por el líder del grupo, el mulá Hebatulá Ajundzada, incluía la disolución del Consejo de Seguridad Nacional y la Comisión Independiente para la Supervisión de la Aplicación de la Constitución, según recogió el diario afgano 'Hasht-e Subh'.
Por otro lado, también ha puesto el foco en las crisis humanitarias y económicas, que se entrecruzan y tienen "un impacto devastador en la vida de todos los afganos", según ha recogido un comunicado de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
"Hoy, con tasas de desempleo crecientes, el 93 por ciento de todos los hogares enfrentan un alto nivel de inseguridad alimentaria con un impacto diferencial y devastador en los más vulnerables: hogares encabezados por mujeres, personas mayores, personas con discapacidades y niños", ha indicado.
Por ello, ha instado a la comunidad internacional a garantizar que se pongan a disposición, "de inmediato", más fondos para ayudar a la población afgana a superar todos estos obstáculos. "De lo contrario, persistirá el sufrimiento humano generalizado en Afganistán", ha zanjado.
