EL CAIRO (AP) — Al menos 125 personas fallecieron a causa de los enfrentamientos tribales registrados en la última semana en la región sudanesa de Darfur, dijo Naciones Unidas el martes.
El episodio de violencia, el último en esta región asolada por la guerra, estalló tras una disputa territorial entre tribus árabes y africanas en la localidad de Kulbus, en la provincia de Darfur Occidental, y las milicias árabes locales atacaron después varias aldeas en la zona.
Entre los fallecidos había más de 100 miembros de la tribu africana gimir y 25 árabes, explicó la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés). Más de 130 personas más resultaron heridas en los disturbios, en su mayoría africanos, agregó.
Según la OCHA, al menos 25 pueblos en la zona de Kulbus fueron atacados, saqueados e incendiados y al menos 50.000 personas se vieron obligadas a huir de sus casas en Darfur Occidental y en la vecina provincia de Darfur del Norte, a donde se propagaron los disturbios.
Los incidentes son un nuevo brote de violencia tribal en Darfur. Sudán sigue inmerso en una crisis más amplia tras un golpe militar en octubre. El golpe trastocó la transición sudanesa hacia la democracia después de que un alzamiento popular forzara la salida del veterano autócrata Omar al-Bashir en abril de 2019.
El conflicto de Darfur comenzó en 2003 cuando grupos de etnia africana se rebelaron y acusaron de discriminación al gobierno de mayoría árabe en la capital, Jartum. El gobierno de Al-Bashir fue acusado de tomar represalias armando a tribus árabes nómadas de la zona y azuzando a mlicias conocidas como janjaweed contra los civiles, algo que el gobierno negó.
Al-Bashir, que está en prisión en Jartum desde que fue depuesto en 2019, fue acusado hace una década de genocidio y crímenes contra la humanidad en Darfur por la Corte Penal Internacional.