SANTA FE, Nuevo México, EE.UU. (AP) — El presidente estadounidense Joe Biden aumentó la asistencia federal a Nuevo México, que combate el incendio forestal más grande del que se tenga registro en la historia del estado.
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El incendio inició con quemas recomendadas y realizadas por el Servicio de Bosques de Estados Unidos que constituyen una práctica ordinaria para eliminar maleza inflamable.
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Sin embargo, las quemas se salieron de control y el fuego ha arrasado con cientos de casas en 1.300 kilómetros cuadrados (500 millas cuadradas) desde principios de abril, según autoridades federales.
“Debemos asegurarnos de que esto no vuelva a ocurrir”, dijo Biden durante una visita a un centro de operaciones de emergencia en Santa Fe, donde se reunió con autoridades locales, estatales y federales.
Biden regresaba a Washington desde Los Ángeles, donde asistió a la Cumbre de las Américas.
El mandatario dijo que el gobierno federal cubrirá el costo total de la respuesta a la emergencia y del retiro de los escombros, una responsabilidad antes compartida con el gobierno del estado.
La gobernadora de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, dijo a Biden que “su gobierno ha sido activo desde el principio” y “necesitamos que el gobierno federal siga reconociendo su responsabilidad”.
Biden expresó su apoyo a que Washington cubra los costos de los daños causados por el incendio, aunque la medida necesita la aprobación del Congreso.
Los problemas causados por el incendio eran visibles desde el avión presidencial Air Force One a medida que se acercaba la aeronave del mandatario. A la distancia se veían columnas de humo e hileras de árboles quemados que parecían cicatrices negras entre zonas arboladas verdes.
Miles de personas fueron evacuadas de poblados rurales con raíces coloniales españolas y altas tasas de pobreza, sin mencionar los fuertes daños ambientales.
El temor al incendio ha dado paso a las preocupaciones sobre la erosión y aludes de lodo en lugares donde las llamas a alta temperatura penetraron el suelo y las raíces.
El fuego es el recordatorio más reciente de la preocupación de Biden frente a los incendios forestales, que se prevé se agravarán a medida que continúe el cambio climático, y porque combatirlos demanda recursos.
“Estos incendios son la luz intermitente del ‘código rojo’ para nuestra nación”, declaró Biden el año pasado tras escalas en Idaho y California. “Están adquiriendo frecuencia e intensidad”.
Pero la fuente del incendio forestal actual en Nuevo México también ha provocado indignación en la región.
Un grupo de residentes del condado Mora demandó al Servicio Forestal de Estados Unidos la semana pasada en un esfuerzo por obtener más información sobre el papel del gobierno.
El Servicio Forestal programa aproximadamente 4.500 quemas prescritas cada año en todo el país, y Biden dijo que la práctica ha sido suspendida al tiempo que se lleva a cabo una investigación.
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias ha aprobado al menos 900 reclamos de ayuda por desastre por un valor de más de tres millones de dólares para individuos y hogares.
